Mariano
de Linas
Por:
Daniel Camilo Acevedo David
En los comienzos de la obra
documental se nos aclara el tema al que nos vamos a enfrentar “Los Balnearios”
y la vida de las personas que viven en ellos, ya sea por visita o porque su
motivación los arraiga a la esencia del mar, el agua. Las imágenes que se nos
muestran al principio son un montaje de imágenes que no concuerdan en
temporalidad pero si en espacio, es el mar, y la representación de la vida desarrollada
en los balnearios, las ciudades se convierten, hoteles se construyen, las zonas
comerciales son el diario vivir.
El montaje en la primera
parte de la película se descubre en una secuencia de imágenes pasando por la
técnica del “video clip” donde los balnearios son los protagonistas, la
narrativa de la historia se hila con la voz en off de una dama, una voz
elegante, fuerte y clara que nos guía con su relato al instante que la música
acompaña. El ritmo que se alcanza entre imágenes y música es guiado a contratiempo
musical, en momentos las imágenes conservan planos cortos: planos detalles pero
de larga duración, en general la primera secuencia de la película utiliza
planos que enseñan la vida en las playas, planos sintéticos cortos en su cuadro
y de corta duración, alternando con planos generales y que en su mayoría son
los que aportan a entender la construcción del espacio y los personajes que aparecen
en imagen. Playas, personas que disfrutan del mar, dunas, y la masificación de
estos espacios introducen al espectador en la pregunta: ¿que nos desea contar
el director Mariano de Linas?, simplemente construir una simultaneidad de
imágenes con la compañía de la voz en off y la música, una construcción de la
narración de manera expositiva o va mas allá
Para un segundo momento
dentro del documental, el montaje es ligero y de corta duración, involucra
imágenes del “HOTEL ATLANTIC” un testigo del tiempo que ha vivido esta zona de
la ciudad que habita cerca al mar. En este momento, en el interior de la
película se utilizan planos generales y de larga duración constituidos en planos secuencias, la voz en off de la
mujer desaparece y pasamos a escuchar la voz en off de un hombre de voz
templada y cálida, este recurso empleado por el director hace indagar en la
toma de la decisión, aun así la voz en off conserva la posición del autor
frente al documental. Construyendo la trama de la película hilando su contenido
hacia un objetivo discursivo, la narrativa en el montaje se contempla desde la
función expresiva del montaje y desde el modo documental expositivo se
identifica un corte ideológico.
Este corte ideológico y/o conceptual
toma fuerza cuando el documental entra a narrar la historia del “HOTEL
ATLANTIC” y la lucha de los personajes
por obtener el poder y titulo de este hotel, una de las subtramas que componen
el documental. El tratamiento que utiliza el director Mariano de Linas dentro
del documental es un montaje de imágenes de archivo fotográficas en película
celuloide a blanco y negro, que aportan a contextualizar y desarrollar el
desenlace de la historia al interior del hotel; todo un referente artístico que
se ubica en la obra de ficción del director Chris Marker “La jetée” del año de 1962
una película francesa filmada en blanco y negro que utiliza en su narrativa el
uso de la imagen fija. El discurso que propone el director Mariano de Linas en
esta etapa del documental se marca en
relación a una etapa de “ficción” entendida como un falso documental,
cruzada con la representación de la “no ficción” donde se monta todo un
discurso ideológico marcando un modo expositivo. Planos fotográficos cortos y
expresivos demuestran la personalidad de los personajes y recrean acciones
intensas de larga duración en la línea de tiempo, su interés narrativo propone
una intensa ideología por contarnos lo que sucedió entre los personajes y su
lucha por obtener los títulos que declaraban al dueño legitimo del hotel.
Pasando por otro bloque del
documental el director se centra en la relación que tienen los diferentes
visitantes del balneario con el mar entre hombres, mujeres de diferentes edades
y animales se entablan analogías de como el lugar es un contenido social de
personas que se reúnen en busca de vacacionar, de Manera expositiva el director
nos contextualiza en una serie de eventos que demuestran que el hombre busca
confluir socialmente con otras personas pero en realidad sigue contrastando con su modo de vida
individualista. El montaje de imágenes se coloca de manera lineal al relato que
expone la voz en off del interlocutor, imágenes que encuadran planos generales
de personas paseando por la playa, por las calles principales descansando,
tomando el sol, flaneando yendo de compras por el malecón, de manera irónica el
director nos presenta un estilo de vida que ha desarrollado el hombre dentro de
su “modernidad” toda una descripción de la cotidianidad que se vive en los
grandes centros comerciales, una mirada que ubica la era de la
reproductibilidad técnica de las ciudades modernas amontonada alrededor de los
balnearios. El modo de representar la vida de estos lugares se desarrolla de
manera expositiva, el tratamiento del sonido desaparece del acompañamiento de
la imagen, no se incluye el sonido intradiegético, ni extradiegético, tomando
todo el protagonismo la voz en off (la voz de dios).
En
el minuto 41’28” se da la bienvenida a un nuevo espacio alejándose de los
balnearios cercanos al mar, llegamos a la población de Miramar el documental
toma una mirada del modo documental participativo donde nos contextualiza la
vida del pueblo, su relación comercial con el turismo, y su historia, aquí nos
entramos a un nuevo tratamiento del documental donde la historia se enriquece
con la entrevista a uno de sus pobladores que nos describe el lugar donde se
encontraba algún día el pueblo tragado por el mar, el documental pasa por el
modo expositivo aquí se ubica la voz en off de diferentes interlocutores que
aparecen y desaparecen con canciones y ritmos diferentes que ayudan a
caracterizar al narrador en función de "leitmotiv". Luego entra a un
modo observacional cuando nos enseña los espacios que se encuentran en la
profundidad del océano en este modo de representación el sonido pierde toda
intermediación de la voz en off, mientras los sonidos ambientes se toman el
protagonismo de la escena.
El
documental dentro de sus diferentes bloques a producido interminable mutaciones
de sus modos de representación, desarrollando un intercambio de miradas entre
lo expositivo, falso documental, participativo, y observacional. El documental se
redescubre en relación de imágenes, lugares, personas, centrándose en la vida
en general o en historias particulares, enriquecido con diferentes ritmos
musicales y voces.
Dentro
del último bloque del documental nos centramos en la vida de un artista llamado
Zucco, este personaje revela variedad de facetas: pintor, poeta, escultor chef,
líder innato en diferentes actividades sociales y económicas, este líder es
objeto de estudio del documentalista Mariano de Linas, como si este personaje
reencarnara las diferentes facetas del pueblo argentino. El director hace un
contraste de lo que se entiende como el balneario que cumple su función de
diversión y esparcimiento, y el balneario que sirve de bien nacional donde la
ingeniería se dispone a la creación de ciudades de hierro que alimenten a la
nación de electricidad y agua, al mismo tiempo el director del documental
construye una analogía entre los intereses sociales e individuales del artista
Zucco y los intereses sociales y particulares que cumple el balneario dentro de
la nación Argentina desde el modo performativo de representación.
La
manera como se aborda al personaje Zucco cumple características dentro de los
modos documental participativo, expositivo, observacional. las diferentes
facetas y modos de representación que
construye el director Mariano de Linas del personaje Zucco son: El Artista (trabajando la vida de Zucco
desde una exploración participativa y expositiva), La Obra ( trabaja desde una representación observacional y
participativa), Los dioses ( construye una mirada observacional y
performativa de la obra y su poder simbólico), Los sueños ( se construye una mirada de representación desde dos
facetas entre lo performativo como se representa por analogía simbólica, y lo
participativo desde cómo se introduce en la narración. por último se ubica en
la Epifanía de la obra un modo
performativo, la mirada del artista sobre la vida, su obra, sus motivaciones,
el arte, y la relación con el agua y el balneario.
Nuevamente
regresando a la ciudad, ella se devela a través de la mirada observacional del
documental.